Desde enero el Gobierno nacional aplicará un nuevo esquema de subsidios para la electricidad, el gas y la garrafa, y en Salta ya advierten que las familias de ingresos medios serán las más golpeadas.
El presidente del Ente Regulador, Carlos Saravia, explicó que el viejo sistema de tres niveles desaparece:
“Solo las familias con ingresos de hasta tres canastas básicas seguirán recibiendo subsidios. Los demás pasan a pagar tarifa plena”.
Pero no es solo eso: también baja el tope de consumo subsidiado.
Antes: 350 kW por mes.
Ahora: 300 kW en verano e invierno, y 150 kW en primavera y otoño.
En Salta, casi 80 mil familias entran en esta categoría y verán subas superiores al 9,5% en sus facturas de EDESA.
El aumento se explica porque el subsidio se recorta directamente del precio de la energía que EDESA paga a CAMMESA.
Cada vez que quitan subsidios, encarecen el precio y esto se traslada a tarifa. El aumento es automático.
“Hay gente que antes sostenía gastos esenciales y hoy no puede. Decide entre colgarse, pedir préstamos o quedarse a oscuras. El sistema eléctrico está bajo presión por falta de inversiones nacionales. Si no se invierte, veremos más interrupciones como las de ayer”, alertó Saravia, en referencia al apagón que afectó a cuatro provincias.






