Efectivos de la Policía fueron alertados sobre una fiesta que se desarrollaba en un domicilio particular en Barrio solidaridad, con un importante número de personas que pagaban un arancel para poder ingresar.
La persona responsable del lugar carecía de las autorizaciones correspondientes. Se labró la infracción a la propietaria y se secuestraron equipos de sonido utilizados en la fiesta.

Se corroboró que para ingresar a la fiesta se abonaba una entrada y se observó la presencia de 50 personas aproximadamente, por lo que se solicitó a los responsables del evento los permisos necesarios para el desarrollo es actividad, manifestando la organizadora no contar con los mismos.
Luego de realizar consulta con la Fiscalía de la zona se procedió al despeje de la concurrencia y a la clausura del evento. La responsable, una mujer de 50 años fue sancionada conforme lo establecen los artículos 72 y 124 de la ley 7135.