Un joven fue presuntamente secuestrado en la vía pública en Cerrillos. Horas después apareció caminando, sin heridas y se negó a denunciar.
Un episodio tan confuso como inquietante tuvo lugar en la localidad de Cerrillos y mantiene en vilo a los vecinos del Valle de Lerma. La noche del miércoles, un joven de 25 años fue presuntamente secuestrado en plena vía pública por un grupo de hombres que lo subieron por la fuerza a un auto blanco.
El hecho fue presenciado por testigos que dieron inmediato aviso al Sistema de Emergencias 911, lo que activó un operativo cerrojo por parte de las fuerzas de seguridad.
El supuesto secuestro ocurrió frente a un negocio de barrio al que el joven había acudido en motocicleta. De acuerdo con testigos, se produjo una discusión entre el muchacho y los y los ocupantes del vehículo, que lo redujeron y lo introdujeron por la fuerza en el auto, dejando la moto tirada en el lugar. El incidente ocurrió a plena vista de varios vecinos uno de los cuales llamó al 911 y denunció lo que acababa de presenciar: “Una persona acaba de ser secuestrada en un auto blanco”, alertó.
A partir de allí se desplegó un operativo policial que incluyó controles vehiculares en accesos clave de Cerrillos, Rosario de Lerma y zonas aledañas.
La hipótesis de un secuestro extorsivo o una venganza motivada por deudas comenzó a circular entre las fuerzas, mientras familiares y allegados del joven aguardaban novedades con preocupación.
Reapareció sin heridas y sin intención de denunciar
La situación dio un giro inesperado cuando, cerca de las 2.30 de la madrugada de este jueves, el joven reapareció caminando en dirección a su casa. Fue abordado por personal policial, pero su reacción sorprendió: no presentaba signos visibles de violencia, se negó a recibir asistencia médica y expreso en forma categórica que no quería hacer ninguna denuncia ni brindar detalles de lo ocurrido.
Este comportamiento encendió las alarmas entre los investigadores, quienes manejaban el caso como un posible delito grave. Si bien la Policía confirmó que el episodio existió —apoyado en testimonios y registros de cámaras de seguridad de la zona—, la falta de una denuncia formal impide avanzar penalmente.
Desde medios locales como Radio Salta, comenzaron a circular hipótesis que apuntan a un trasfondo más complejo. Algunas fuentes sugieren que el caso podría estar vinculado a deudas, conflictos personales, o incluso a disputas por actividades ilícitas en la zona. Sin embargo, ninguna versión fue confirmada oficialmente y la investigación quedó paralizada por la ausencia de una denuncia judicial.
Un caso entre lo policial y lo oculto
Lo ocurrido en Cerrillos quedó en el umbral entre lo policial y lo que permanece oculto. El joven, por razones que se desconocen, optó por el silencio. No brindó ninguna declaración, no permitió que se le tome denuncia y se retiró sin pedir ayuda. El hecho ocurrió, pero el relato se corta justo donde empieza la sospecha.
La escena inicial, protagonizada por varios hombres reduciendo por la fuerza a un motociclista y retirándose con él en un auto, es real. Está documentada. Lo que no se sabe es qué ocurrió después ni por qué el joven eligió callar. ¿Fue una advertencia? ¿Recibió amenazas? ¿Está encubriendo a alguien?
Hasta que no haya una denuncia formal, el expediente no se abrirá. Mientras tanto, la comunidad de Cerrillos sigue hablando de “el secuestro que no fue” y tratando de entender la situación.
Diario del Valle
