El interventor de Aguas Blancas, Adrián Zigarán fue muy crítico con la actuación de la justicia y de las fuerzas federales desplegadas en la zona fronteriza con Bermejo en Bolivia.
Dijo que hace tiempo había denunciado que los bagayeros habían abierto una aduana paralela en finca Karina metros más abajo del alambrado olímpico y el puesto de aduana y gendarmería.
No se hizo nada y por ese lugar seguían ingresando al país drogas y mercadería de contrabando.
Sin embargo, llegó C5N a la zona para realizar una serie de notas en la zona de frontera y de repente aparecieron las fuerzas federales por todos lados cerrando incluso la aduana paralela en finca Karina con un importante despliegue de efectivos.
A esto se le sumo que también llegó TN razón por la cual en estos días se observa una inusual presencia de efectivos de distintas fuerzas de seguridad patrullando la zona costera del rio Bermejo.
Lamentablemente –dijo Zigarán- con el denominado “Plan Güemes” cazan ratas y se les escapan los elefantes.
Adrián Zigarán aseguró que le gustaría que la Justicia Federal lo acompañe y que las fuerzas de seguridad abandonen el relajamiento en el que ingresaron.
El interventor de Aguas Blancas afirmó que “cuando arrancamos la intervención, la situación era muy complicada, pero siento que hoy las fuerzas de seguridad se han relajado. Ya no hay tantos secuestros como antes, aunque todavía hay importante sector del narcotráfico que sigue operando”.
Solo basta con leer en los medios los importantes cargamentos de drogas que son secuestrados antes de llegar a Rosario de la Frontera, en Tucumán y en Santiago del Estero. Todos los vehículos involucrados parten de Aguas Blancas y Orán, lo que marca a las claras que las drogas siguen ingresando a Salta y salen para ser distribuidas en el sur el país.
“Lo mismo pasa con la Justicia Federal- agregó Zigarán- porque cuando le decís algo a Gendarmería, ellos te contestan que no tienen orden de un juez y que su jefe no les dio nada. Entonces tengo que venir yo a ver cómo se está usurpando la tierra de la banquina de Belén desde 2019. Todos los días me hacen una casa más, y la Justicia pone medidas de no innovar hasta que se defina la cuestión de fondo. No podemos dejar que siga creciendo la hilera de casas hasta el infinito. Como interventor, mi responsabilidad es poner orden y proteger al municipio de Aguas Blancas”.
Reclamó la necesidad de interlocutores nacionales que realmente garanticen el cumplimiento de las normas en la frontera
“Creo que faltan interlocutores nacionales que permitan que en Aguas Blancas y en los pasos fronterizos se apliquen las normas como corresponde”.
