Los jubilados del barrio porteño habían recibido en su domicilio a su hijo, su nuera y sus dos nietos, quienes venían de Italia. Un día después, fallecieron todos menos el bebé
En las últimas horas salieron a la luz nuevos detalles de la tragedia ocurrida en Villa Devoto, donde una familia de cinco integrantes falleció por inhalación de monóxido de carbono en una vivienda ubicada en Sanabria 3768.
Según pudo confirmar Infobae, las víctimas fatales son: Demetrio De Nastchokine (79); su esposa, Graciela Leonor Just (73); el hijo de ambos, Andrés De Nastchokine (43); su pareja, Marie Camille Lalanne (40) y su hija de cuatro años, Elisa De Nastchokine Lalanne.

La tragedia se desató tan solo un día después de que el matrimonio recibiera la visita de Andrés, que llegaba desde Italia
Los cuerpos sin vida fueron hallados por la tarde de este martes, tras un llamado al 911 de una familiar. Los médicos del SAME confirmaron los fallecimientos en el lugar. El único sobreviviente es un bebé de un año, hijo de la joven pareja.
Según reconstruyeron, la tragedia se desató tan solo un día después de que el matrimonio recibiera la visita de Andrés, que llegaba desde Italia junto a su esposa francesa y sus dos hijos pequeños.
Incluso, la llegada de la familia desde Italia al aeropuerto de Ezeiza fue documentada en redes sociales por otro de los hermanos De Nastchokine. En las imágenes, adjuntas en esta nota, se puede ver a Andrés y a su madre. Demetrio y Graciela eran padres de otros tres hijos: Maia, Alejandro y Sergio.

Andrés había llegado junto a su esposa y sus dos hijos menores de edad.
Cómo murió la familia
Los Nastchokine fallecieron este martes por la tarde en una casa ubicada en la calle Sanabria, entre Pedro Morán y Ricardo Gutiérrez. Habían inhalado monóxido de carbono.
Los fallecimientos se constataron después de un llamado al 911 realizado por un familiar de las víctimas, tras lo cual policías de la Ciudad se dirigieron al domicilio.
Una vez arribado personal de Bomberos, ventilaron los ambientes para que médicos del SAME pudieran constatar el fallecimiento en el lugar de casi toda la familia.
En el primer piso, en una habitación, se encontraban ya sin vida Andrés y su esposa francesa, Marie Camille, al igual que la hija de ambos.
También hubo lugar para el milagro, ya que, en otra habitación del mismo piso, se hallaba un bebé de un año, consciente y en aparente buen estado de salud. Fue trasladado al Hospital Zubizarreta, para ser derivado luego al Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez.
Un piso más arriba, en otra habitación, yacían muertos Demetrio y Graciela. Eran los dueños de la casa.
Según le manifestaron a Infobae fuentes policiales, las primeras pericias de los bomberos indicaron que la causa de las muertes, “en un 99%”, fue la inhalación de monóxido de carbono. La misma hipótesis principal manejan los peritos de la Policía Científica.
Por otro lado, el bebé sobreviviente tenía síntomas de haber inhalado monóxido de carbono, más allá de su buen estado general.