El 7 de agosto pasado, un hombre de 35 años llegó en estado de ebriedad al domicilio de su expareja para ver a sus hijos en Embarcación.
Levantó al niño y la mujer lo empujó para quitárselo, por lo que sacó un cuchillo y comenzó a lesionarla con más de quince heridas, pero al ver la cantidad de sangre decidió irse del lugar.
La jueza de la Sala II del Tribunal de Juicio de Tartagal Asusena Vásquez, lo condenó en juicio abreviado por ser autor del delito de lesiones graves agravadas por el vínculo y el género, y le impuso la pena de ocho años de prisión de ejecución efectiva.
Además, ordenó la extracción de muestras genéticas y la realización de terapia psicológica y tratamiento psiquiátrico mientras permanezca en detención. Fue trasladado hacia la dependencia policial de Fortín Dragones hasta su alojamiento en la cárcel de Tartagal.