La secta de Cristina Kirchner, un liderazgo que casi nadie se atreve a cuestionar. Por Carlos Pagni

    0
    170

    Sin embargo, hay algunas fisuras, algunos herejes o algunos apóstatas que ponen en duda el rol de la Vicepresidenta.

    Estamos, efectivamente, asistiendo a una disputa de poder cada vez más intensa dentro de todos los partidos, sobre todo, de Juntos por el Cambio y, especialmente, del Frente de Todos, donde la discordia entre el Poder Ejecutivo, entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner, ya llega a niveles de enfrentamiento como si se tratara de Gobierno y oposición.

    Además, hay una disputa un poco más sorda entre distintos protagonistas del FdT para conseguir la bendición de Cristina que consagre a un candidato a presidente. Me quiero basar sobre en una frase muy interesante de una figura, si se quiere, secundaria del elenco. Es la mano derecha de Axel Kicillof, jefe de asesores y probablemente, su hombre de mayor confianza, Carlos Bianco, en la provincia de Buenos Aires, que hizo una afirmación muy llamativa. Dijo: “Si nuestra fuerza política decide que Axel, en vez de renovar como gobernador, sea el candidato a presidente, lo vamos a aceptar”.

    Sin embargo, la frase más interesante es, “cuando digo fuerza política, me refiero a Cristina Kirchner”. Es muy revelador, hay que agradecerle la sinceridad a Carlos Bianco, que identifica plenamente a toda una fuerza política con una persona. Hacía mucho tiempo en Argentina que no se veía ese grado de idolatría, de consagración, del culto a la personalidad.

    ¿Por qué es más llamativo? Porque el dedo de Cristina ha cometido un desastre en el 2019, que fue armar este Gobierno, que en la mayoría de las encuestas empieza a tener 95% de rechazo. Hacía tiempo que un gobierno no tenía semejante nivel de negatividad. Y esa negatividad, obviamente, se concentra en Alberto Fernández, pero también se proyecta sobre ella, que sigue jugando al mismo método. Es muy curioso también que, con un método que dio tan mal resultado, se siga ensayando lo mismo.

    ¿Quiénes están esperando el dedazo de Cristina? Primero, el propio Axel Kicillof, que ansia que ella lo vuelva a poner en la provincia de Buenos Aires. En competencia con Kicillof, “Wado” de Pedro, que también espera ser bendecido para la candidatura a presidente, salvo que Cristina decida que Kicillof va para presidente y él, tal vez, para gobernador; y el tercero, nadando en un mar de dudas económicas, con el dólar tocando récords y la inflación tocando otros récords, pidiendo de rodillas al Fondo Monetario Internacional que le dé más dólares para compensar la caída de reservas, Sergio Massa.

    Hay una reincidencia en el método, es muy difícil que con los mismos métodos tengan distintos resultados. Nadie cuestiona demasiado este liderazgo, que se va convirtiendo en un liderazgo casi de una secta de gente que sigue ciegamente a alguien, pero hay algunas fisuras, algunos herejes o algunos apóstatas. El que se plantea como más temprano en esta posición de crítica, inesperadamente, Julio de Vido, que el domingo pasado, en un largo pasaje, dijo que el mayor error que cometió Néstor Kirchner -se van a cumplir este jueves 20 años de su llegada al poder y va a haber una celebración por parte de CFK- fue haberle dejado el poder a Cristina.

    DEJA UNA RESPUESTA

    Por favor ingrese su comentario!
    Por favor ingrese su nombre aquí