Un médico murió al caer por el hueco de un ascensor al intentar salvar a su pareja

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Ocurrió en Rosario. Germán Cipulli (55) era cirujano, ginecólogo y mastólogo; y docente de la Facultad de Medicina. Cayó desde el segundo piso hasta el segundo subsuelo.

“Te fuiste ayudando, mi querido amigo, como lo hicisteis toda tu vida”, reza uno de los múltiples posteos en Facebook tras la trágica muerte del médico ginecólogo, cirujano y mastólogo Germán Cipulli (55), quien cayó por el hueco del ascensor de un edificio de la exclusiva zona de Puerto Norte en Rosario, cuando intentó socorrer a su pareja, quien había quedado atrapada.

Todo ocurrió el domingo alrededor de las 17 en el edificio de Cándido Carballo al 100, cuando el ascensor habría quedado atascado entre el segundo y el tercer piso con la mujer, pareja de la víctima, en su interior, dijeron las fuentes consultadas.

Ante esto, Cipulli intentó ayudarla “abriendo manualmente la puerta del segundo piso”, pero, por motivos que se desconocen, cayó al vacío hasta el segundo subsuelo, lo que le provoco una serie de graves traumatismos en el cuerpo y en el cráneo. Murió en el acto.

En el lugar, trabajaron los bomberos de la zona y los peritos que, por orden de la fiscal Mariela Oliva, a cargo de la investigación; secuestraron la ropa de Cipulli. La causa se investiga como homicidio culposo.

En ese sentido, el subsecretario de Espacio Público de la Municipalidad de Rosario, Luciano Marelli, explicó, según lo que consignó en declaraciones a LT8: “Es un equipo que tiene unos diez años de uso y de tecnología moderna. Cuenta con un sistema apertura y cierre de puertas automáticos, entre otras características. Y la empresa que realiza el mantenimiento de los dos ascensores que están en el mismo edificio también está habilitada”, amplió el funcionario.

Marelli, además, remarcó que se clausuró el ascensor donde ocurrió el accidente, pero preventivamente también se dispuso que deje de funcionar el otro que comparte el mismo hueco. “Los mecanismos de seguridad de las puertas funcionaron. Es decir, que hubo que forzarlas para abrirlas. Eso es lo que nos dicen las personas que estuvieron allí”, sintetizó.

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